30 escuelas participarán en la prueba piloto de la Nueva Escuela Mexicana
Marx Arriaga Navarro, Director General de Materiales de la Secretaria de Educación Pública, señaló que no hay contenidos de la 4T en la Nueva Escuela Mexicana, por el contrario destacó que se trata de una manera diferente de ver la educación ya que todos los infantes deben de recibir las mismas oportunidades para salir adelante.
Comentó que los materiales Educativos anteriormente se le delegaba la responsabilidad a las editoriales o grupo de académicos al interior de la SEP, quienes a la distancia y sin saber lo que ocurría en las aulas hacían esos materiales.
Subrayó que se cambio el modelo educativo y convocaron de manera abierta a todos los maestros para que participarán en el nuevo diseño.
Aseguró que en los primeros libros que tuvieron les llegaron más de 3 mil solicitudes de maestros de donde salió mucho material de Español, Historia, y Geografía.
Aseguró que ya se está trabajando en los nuevos libros de texto para la Nueva Escuela Mexicana por lo que laboran de manera intensa, incluso convocaron a especialistas, investigadores, para que aporten sugerencias de cómo mejorar los nuevos materiales.
Explicó que a lo largo del año sacarán borradores para acompañar los procesos de formación continua para que los maestros de primaria, secundaria y preescolar tengan materiales y que les den retroalimentación del trabajo en el aula.
Comentó que son 30 escuelas las que estarán trabajando en la prueba piloto en los diferentes estados.
“En en algunos han pedido más pero llevarán los dos programs de estudios, los demás ya cuentan con sus materiales completos para seguir su formación conforme a los planes de estudios y que en el nuevo programa serán 6 materiales por grado por 6 grados en educación primaria”.
Destacó que cada estado determinará si se incrementa el número de escuelas ya que la federación ha generado una muestra representativa para hacer el análisis de corte cuantitativo.
«Lo radical es la manera en cómo se enseña, es decir la metodología el paradigma que se utiliza, estamos acostumbrados a tener una educación centrada en el éxito y medir la calidad por un trabajo individual, no cuantitativos, centrada en la meritocracia hasta los estímulos que se dan en los sexenio anteriores se centraban en la calificación».