Columnistas

El PANorama de Joaquín

Por Joaquín Guzmán Avilés

¡Tremendo inicio de año!

México se convirtió en noticia internacional este inicio de año y no precisamente por motivos positivos, sino por los ataques, agresiones, balaceras, y desmanes que ocasionó el crimen organizado en Culiacán, Sinaloa.

Apenas habían pasado 4 días del 2023 cuando nos enteramos que grupos delincuenciales habían iniciado enfrentamientos, bloqueos e incendios en la ciudad de Culiacán, como respuesta a la recaptura de Ovidio Guzmán, hijo del “Chapo” Guzmán Loera y uno de los principales distribuidores de droga en el país. 

El gobierno finalmente decidió a combatir de fondo al crimen organizado, sin favoritismos, ni distinciones. Lo malo es la consecuencia que ello trajo, porque la propia autoridad resultó atacada y la ciudadanía quedó en medio de enfrentamientos.

La inseguridad en aquella ciudad no acaba, prácticamente hubo toque de queda en los hogares y la actividad se paralizó. 

Ahora que decidió actuar esperemos que no se echen para atrás, y al rato nos salgan con la sorpresa de su liberación o negociación. 

México es presa del crimen organizado y el gobierno de Morena no había hecho nada hasta el día de hoy que decidió empezó a cortar cabezas y no cualquiera, sino una de las grandes, pues dudamos que las cosas se queden tranquilas, una vez pateado el avispero no queda de otra más que crontolar la situación. 

Sin duda, la inseguridad y el combate contra los grupos delictivos no sólo se vive en aquella zona del país, sino en toda la república mexicana, incluyendo Veracruz, una muestra de ello fue lo que ocurrió en Poza Rica hace un par de días donde el combate por la zona entre dos células delictivas dejó el ataque a bares y ocho muertos en un día. 

Quien paga los platos rotos siempre es la ciudadanía y en este caso no es la excepción. Esperemos ver que pasa en los próximo días y si la situación de inseguridad mejora o no. 

De lo contrario, la sociedad estará en su derecho de exigir y cobrarle a las autoridades los resultados en la materia, y no ahorita, sino en los próximos procesos electorales.