Xalapa celebra el Grito de Independencia con Rocío Nahle, primera mujer gobernadora en encabezar la ceremonia
Xalapa, Ver., 15 de septiembre de 2025.– Esta noche, la Plaza Lerdo se convirtió en un mar de verde, blanco y rojo para celebrar el tradicional Grito de Independencia, en un evento que por primera vez en la historia de Veracruz fue encabezado por una mujer; la gobernadora Rocío Nahle García.
Desde temprana hora, cientos de familias xalapeñas y visitantes comenzaron a reunirse frente al Palacio de Gobierno para disfrutar de una velada musical y de una de las festividades más esperadas del año.
El ambiente fue amenizado por la alegría tropical de La Super Explosiva Sonora Dinamita y, más tarde, por la energía de La Original Banda El Limón de Salvador Lizárraga, que hizo cantar a coro a los asistentes con sus éxitos más reconocidos.
En punto de las 11:10 de la noche, y luego de que en pantallas los xalapeños pudieran observar a la primera presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, dar el Grito, Rocío Nahle caminó los pasillos del palacio de gobierno acompañada de su esposo, portando el tradicional vestido blanco de Jarocha.
La gobernadora recibió la bandera de manos de una escolta compuesta únicamente por mujeres, en un gesto que refuerza el eslogan de “tiempo de mujeres” que caracteriza su administración y finalmente salió al balcón del Palacio de Gobierno.
Con la bandera en mano, Nahle recordó a los héroes que dieron patria y libertad, ondeó el lábaro patrio y lanzó el tradicional “¡Viva México!”, que retumbó en cada rincón de la plaza, acompañado por aplausos, vítores y el eco de campanas, posteriormente los asistentes pudieron disfrutar de los fuegos artificiales que iluminaron el cielo xalapeño.
Cabe destacar, que el operativo de seguridad se desplegó tanto en la explanada como en calles aledañas, con filtros de revisión y presencia de elementos policiacos para garantizar que la celebración transcurriera en paz y tranquilidad.
Tras la ceremonia, La Original Banda El Limón tomó el escenario y desató la euforia colectiva, logrando que la multitud cantara y bailara al unísono, cerrando una noche que quedará marcada no solo por la música y el fervor patrio, sino por el momento histórico de ver a una mujer veracruzana dar el primer Grito de Independencia en el estado.
